Fuente: АrсhDаilу
Casa del Árbol / Sala 03 Arquitectura
Texto descriptivo proporcionado por los arquitectos. Ubicado en el interior del estado de Sao Paulo, el proyecto fue desarrollado para una pareja y su pequeña hija, que se mudaron de la capital buscando disfrutar de una mayor calidad de vida y acoger a familiares y amigos los fines de semana y vacaciones.
Construida sobre un terreno de poco más de 2.000,00 m², la “Casa das Arvores” o “Casa de los árboles” recibió su nombre debido al estado inicial del terreno. El principal desafío fue encontrar una lógica común entre el paisaje y las solicitudes de los clientes, optimizando el uso del lote y eliminando la menor cantidad de árboles posible.
La forma de L de la casa orienta el espacio de entretenimiento y hospedaje hacia el centro del lote y el espacio privado hacia el jardín lateral del lote, creando privacidad entre la vida cotidiana interna y los espacios de hospedaje externos. Con el primero colocado paralelo a la calle y el segundo perpendicular a la calle, el área de entretenimiento y piscina, que recibe luz solar durante todo el día, se convierte en un núcleo dentro de la casa.
La idea de posicionar el interior del espacio a lo largo de dos ejes principales, maximizando el potencial del espacio exterior, permitió una utilización más eficiente del lote.
Al entrar a la casa, hay una sala comedor a un lado y un área gourmet al otro. Diseñados para satisfacer las necesidades de alojamiento y vida cotidiana de la familia, los espacios pueden estar completamente integrados o separados por una división de vidrio, lo que permite una mayor privacidad cuando sea necesario.
Inspirado en el concepto de paseo arquitectónico de Le Corbusier, un conjunto de cinco suites se distribuye a lo largo de un corredor de vidrio que es perpendicular a la calle. Esta ubicación agrega valor al punto de acceso de los dormitorios y enmarca el exterior, lo que permite una interacción de luces y sombras dentro del pasillo.
Con la intención de emular el hogar con el paisaje, se utilizaron tonos tierra para las fachadas. El ladrillo macizo unido en un tono más oscuro, junto con las vigas metálicas pintadas de marrón, combinan lo rústico y lo sofisticado, generando una fachada única y delicada.
Fuente: АrсhDаilу